Ya consolidados los juegos como el producto estrella de una de las industrias del entretenimiento más valiosas y prósperas a nivel mundial podemos empezar a tener en cuenta como opción válida de ocio una variante que conjuga diversión y ganancias económicas, y no estamos hablando de participar en los e-sports a nivel competitivo, aunque bien mirado podría tener ciertas semejanzas, hablamos del juego en casinos online.
Cartas virtuales. Si eres de la generación nacida y crecida en los años ochenta, o incluso nos atreveríamos a incluir a los crecidos durante los noventa, probablemente una de tus primeras incursiones en los juegos de ordenador haya sido el sempiterno Solitario, juego que incluían todas las versiones de Windows. Era sencillo y adictivo, y al estar tan a mano era una de las opciones para pasar los ratos muertos más utilizadas por niños, jóvenes y adultos. Y reconozcámoslo, era realmente divertido.
Los hermanos mayores. Si esta primera toma de contacto con el mundo de las cartas virtuales hizo nacer en nosotros el gusto por este tipo de juegos quizás los minijuegos de sagas tan emblemáticas como Final Fantasy o Red Redemption hayan hecho que las cartas se conviertan para algunos de nosotros en una opción a tener en cuenta a la hora de pasar un buen rato y relajarnos.
En el caso de la saga del far west incluso podemos jugar a juegos de cartas reales como pueden ser 21 blackjack, o póker en su variable del Texas Hold’ Em Poker, muy extendida hoy en día. Seguro que si son aficionados al póker ya lo conocen, pero para los legos en el asunto haremos, con su permiso, un pequeño resumen de cómo se juega:
- Todos los jugadores reciben 2 cartas, y comienza el jugador de la izquierda del que ha repartido colocando la “ciega pequeña”, se llama ciega porque es una apuesta obligatoria antes de ver las cartas propias, seguida de la “ciega grande” apuesta obligatoria realizada por el jugador inmediatamente posterior y que es de justo el doble de la apuesta anterior.
- Después, y siguiendo hacia la izquierda, los jugadores ven la apuesta, esto es igualarla o se van retirando si no se ven con posibilidades de ganar. Una vez todo el mundo ha realizado su jugada se muestran tres cartas sobre la mesa, tres cartas que están disponibles para todos los jugadores.
- Después de esto los jugadores empiezan otra ronda en la que pueden o bien pasar, igualar o subir la apuesta. Hay que tener en cuenta que subir la apuesta significa irremediablemente que esta ha de ser doblada. Al acabar se muestra otra carta, se repite una última ronda de apuestas y se muestra la carta final.
- Tras esto los jugadores que no se hayan retirado muestran las cartas y gana el que tenga la mejor mano. Sencillo, ¿verdad?
Player vs player. Si nos gusta el póker y también nos encanta disfrutar de la adrenalina de jugar contra otros seres humanos una buena alternativa pueden ser los casinos virtuales, donde encontraremos una interesante variedad de juegos, como en la plataforma juegos-casino.com.mx (fiable y muy fácil de utilizar) u otra miríada de páginas como la de 888, etc. Una simple búsqueda nos mostrará que las opciones son más que amplias en este sector. Y si preferimos jugar en solitario también dispondremos de juegos para un solo jugador, como el anteriormente mencionado blackjack o máquinas de tragamonedas, que también pueden darnos buenos premios si tenemos la suerte o la habilidad necesaria para ganar.
Decíamos arriba en este mismo artículo que tenía cierta semejanza con los e-sport porque a través de algo tan aparentemente mundano como el jugar, y da igual que sea pegar tiros en Fortnite, o participando en torneos de póker online, hay gente que se gana un buen sueldo del que vivir. Si somos capaces de lograr vivir del juego o no pasa de mera diversión lo iremos viendo nosotros mismos mediante nuestra progresión, lo único que necesitamos además de habilidad y constancia es, y esto es muy importante, una buena dosis de realismo y no jugar nunca más allá del dinero que podamos perder. Recuerden que, aunque el juego se realiza a través de un medio virtual, el dinero con el cual estamos jugando es muy real.
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