Dark Souls III

Mi primera experiencia con la saga Souls fue Dark Souls para PS3, después jugué el Demon Souls seguido por Bloodborne y por último Dark Souls II. Los tres títulos me gustaron mucho; la dificultad y jugabilidad fueron experiencias que ni Skyrim, que es uno de mis juegos favoritos, podía entregarme. Finalmente después de mucho esperar, llegó la conclusión de la trilogía (o tetralogía) para el PS4. Xbox One y PC. ¿Es una entrega digna de llamarse el clímax de la saga?

Lo bueno:

  • El movimiento es más fluido y rápido que nunca
  • Los leitmotiv de los jefes son realmente épicos
  • El sistema multiplayer ya no está limitado a Soul Memory o a diez niveles
  • El juego corre a más de 30 cuadros por segundo
  • Visualmente es espectacular

Lo no tan bueno

  • Se siente corto, mucho más corto que Dark Souls II
  • El combate se siente demasiado similar a Bloodborne (no necesariamente malo, pero pierde cierta identidad Souls)
  • El mundo no tiene la conexión perfecta que existía en el primer Dark Souls

Historia

Pos… hay que encender la llamita de nuevo…

Dark Souls a pesar de no tener mucha historia presentada de manera clásica u obvia como en otros juegos, cuenta muchas cosas de manera minimalista y a través de las líneas por así decirlo, y el final, sí uno entiende que significa tras haber jugado los tres juegos de la trilogía, es simplemente sublime. Ponerme a contar la historia o una simple introducción como en otras reseñas sería un spoiler para la manera en que este título la presenta así que solo diré que se entrelaza con ambos Dark Souls anteriores sin embargo no se es necesario haberlos jugado para disfrutarla.

Jugabilidad

El combate es mucho más rápido que en las entregas anteriores, al principio no me gustó ese cambio, principalmente por que sentí que perdió cierta identidad y se volvió demasiado similar a Bloodborne. El esquivar se hizo mucho más fácil, a niveles de invencibilidad como en Bloodborne. Con el tiempo me acostumbré a ese cambio, y ya no me molesta. Otro cambio al juego es que la mayoría de las armas tienen habilidades especiales, algo que muy pocas tenían en el dos. Esto le agrega un nuevo estilo de juego y más profundidad al combate, ya que muchos movimientos pueden llegar a verse muy espectaculares.

El multiplayer sigue siendo tan agradable y tan tedioso como siempre. Invocar a gente al azar funciona igual que siempre, y para jugar con amigos basta con poner una contraseña en común y esperar un poco para ver la señal. Ahora no importa la diferencia de niveles ni existe el Soul Memory, un personaje de nivel 10 puede invocar fácilmente a uno de nivel 200 sin problemas y sin arruinar la dificultad, ya que el nivel del invocado se ajusta al nivel del invocador, algo que seguido me costaba la vida. Al igual que los títulos anteriores, en este también hay mapas donde la gente se concentra en el PvP, algo que es agradable cuando uno desea jugar contra otros jugadores, pero también muy molesto cuando uno desea jugar únicamente con amigos, ya que el mapa se vuelve un caos debido a invasiones consecutivas que nunca terminan.

Presentación

Dark Souls siempre ha tenido música que le da una ambientación muy apta a sus títulos, sin embargo muy pocas melodías podría decir que eran épicas como la de Ashen Lake de Dark Souls I, ahora con la entrega de este título, debo decir que la música es mejor que nunca. Los niveles y escenarios siguen con música más ambiental que dramática, sin embargo ahora muchos de los temas de los jefes son realmente increíbles, tan épicos como las mejores películas de Hollywood.

Los escenarios y mapas están muy bien diseñados, la planeación se siente meticulosa, y la mayor parte de los mapas están unidos de alguna manera sin embargo, lamentablemente al igual que Dark Souls 2, este tampoco tiene esa unión tan perfecta entre todo el mundo que tenía el primer Dark Souls.

Las gráficas, las texturas, los efectos de partículas, y los diseños tanto de los personajes como los enemigos, jefes y escenarios son mejores que nunca. Muchos podrían decirse que son reciclados ya que vienen de entregas anteriores, sin embargo eso no limita el juego, ya que también cuentan con muchísimos diseños nuevos. ¿Osea, realmente quién podría quejarse de tener demasiadas armas entre las cuales escoger? Dark Souls no es el primer juego que incluye muchas armas, sin embargo generalmente este tipo de juegos caen en dos categorías, juegos como Borderlands y Diablo, que te entregan armas al azar donde podrás tener miles de armas y casi todas funcionan de manera demasiado similar, o juegos como Skyrim donde existe una variedad decente sin embargo a la larga solo usas la más poderosa pues las otras se vuelven obsoletas. En Dark Souls 3, podrán haber muchas armas no muy buenas, sin embargo también hay muchísimas armas que pueden llegar a ser las que el jugador usa el resto del juego, cada una teniendo sus diferentes beneficios y complicaciones, un aspecto que altera dramáticamente el estilo del juego. Personalmente cambié de arma tres veces durante el juego, y nunca porque me dejó de gustar la anterior ni porque fuese inferior a las demás. 

Otra cosa que me gustó mucho de este título es la fluidez que tiene Bloodborne, o bien, Dark Souls II en PS4. ¿A qué me refiero con fluidez? No hablo en sí de las mecánicas de combate en este momento, me refiero a los cuadros por segundo, Dark Souls 3 no está limitado a 30, algo que hace que los movimientos y la acción sea fluida y mucho más agradable a la vista, y eso sin mencionar lo conveniente que es para el jugador. Para aquellos que lo compraron en PC, debo decir que es un port extremadamente bueno, el juego corrió impecable en mi computadora alcanzando siempre más de 60 cuadros por segundo, algo que la primera entrega era infame por no cumplir.

Conclusión

Al principio no me hacía feliz con la jugabilidad tan similar a Bloodborne, y lo que aparentemente era una dificultad muy inferior a los títulos anteriores. Después de terminarlo dos veces y jugar y ver jugar a mis amigos, entendí que la dificultad no se redujo, simplemente ya tengo experiencia en estos títulos. Todo lo negativo que sentí al comenzar a jugarlo desapareció con el tiempo, y ahora debo decir que Dark Souls 3 es el mejor RPG que he jugado este año. Aun si no has jugado los demás títulos, Dark Souls 3 es un juego que no se pueden perder.

Cinco estrellas


Este escrito representa únicamente la opinión de su autor y no necesariamente la del equipo de Versus.


Agradecemos a Bandai Namco las facilidades para realizar esta reseña.

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