El periódico francés Le Libèration publicó recientemente un artículo desvelando al menos 50 casos de agresiones sexuales de los cuales Ubisoft tuvo constancia y no dio respuesta.
Además, el mismo diario ha publicado hoy otro informe que explica en profundidad algunos de estos hechos y pone el foco en la culpabilidad del departamento de recursos humanos de la empresa, que puede colaborar directamente en evitar las denuncias de los trabajadores más allá. El medio francés cita declaraciones de empleados que intentan denunciar casos de abuso laboral o sexual con recursos humanos y se encuentran con una barrera hostil.
«Son creativos, así es como manejar» o «si no puedes trabajar con él igual es el tiempo de las marchas» son respuestas que estos trabajadores reciben cuando tratan recursos humanos en busca de ayuda ante este tipo de situaciones. En el artículo se mencionan los nombres de los tres altos cargos que se han dimitido recientemente, Serge Hascoët, Yannis Mallat y Cécile Cornet, aunque se habla de que era algo generalizado en la compañía.
Un empleado de Ubisoft que habla bajo el seudónimo de Catherine explica que «las personas [de recursos humanos] responsables de ver a la gente y ayudar en su trayectoria profesional en la compañía no tienen problemas de acoso» y que «no sabían cómo escuchar a las víctimas». Además, esta fuente dice que en Ubisoft el foco siempre estaba puesto en el negocio, no en las personas, y eso es «lo peor de todo» porque desde recursos humanos también se aseguraban de lo primero era «que el juego saliera cuando ellos necesitanban».
— Ubisoft (@Ubisoft) July 12, 2020
Yves Guillemot dijo en su comunicado que en Ubisoft están trabajando para evitar que esto vuelva a suceder, incluso tomando medidas disciplinarias, y pretendiendo cambiar completamente la política de la compañía a este respecto, centrándose en concreto en la remodelación de recursos humanos. En este nuevo artículo Cécile Cornet supuestamente dijo en 2019 que:
«Yves está de acuerdo con una gestión tóxica siempre y cuando el resultado que se obtiene de ese equipo supere su toxicidad».
Al parecer se ha producido una reunión de todos los departamentos de recursos humanos que están dolidos por la imagen que se está dando de ellos y han amenazado con perder la compañía. Fuentes internas aseguran que los responsables de los equipos no están convencidos del cambio prometido, piensan que todo esto es «una caza de brujas» y están hablando con sus empleados casi por obligación.
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