Google remueve la licencia de Android a Huawei

Tras la represión de Estados Unidos contra las compañías de tecnología chinas, Google ha cortado la licencia de Android de Huawei, lo que representa un gran golpe para el fabricante de teléfonos asediado.

Reuters informó por primera vez de las noticias y The Verge confirmó posteriormente la suspensión de los negocios de Google con Huawei con una fuente familiarizada con el asunto.

Un portavoz de Google dijo solo:

«Estamos cumpliendo con la orden y revisando las implicaciones».

La orden, en este caso, parece ser la reciente decisión de la Cámara de Comercio de los EE. UU. de colocar a Huawei en la «Lista de Entidades», que, como informa Reuters, hay una lista de compañías que no pueden comprar tecnología de compañías estadounidenses sin la aprobación del gobierno.

Huawei ahora está restringido a usar el Proyecto de código abierto de Android (AOSP), lo que aísla a la compañía de las aplicaciones y servicios críticos de Google que los consumidores fuera de China esperan en los dispositivos Android.

Eso también significa que Huawei solo podrá enviar actualizaciones de seguridad para Android una vez que estén disponibles en AOSP, suponiendo que la empresa utilice su propio sistema de actualización. Aún no está claro cómo afectará esto a la gama completa de integraciones de Android de las que depende Huawei. 

Huawei ha estado bajo una creciente presión del presidente Trump y del gobierno de los Estados Unidos por temores de que el gobierno chino pueda usar su equipo para espiar las redes estadounidenses. Estos temores han estado en construcción durante mucho tiempo; en 2018, las agencias de inteligencia estadounidenses advirtieron contra el uso de dispositivos Huawei y ZTE, y los políticos estadounidenses han descrito a Huawei como «efectivamente un brazo del gobierno chino».

Huawei sostiene que no es posible que el gobierno chino envenene sus equipos con puertas traseras, y se ha mantenido optimista sobre el futuro de su negocio. Pero este último revés de Google representa un grave riesgo para el futuro del negocio de dispositivos móviles de Huawei.

La compañía ya estaba preparando sus propios sistemas operativos en el caso de que se le prohibiera el uso de Android y Windows, pero dado los temores de los Estados Unidos sobre la interferencia extranjera, es probable que un sistema operativo propio se enfrente a un escrutinio aún mayor que el software de Google.

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