Homefront: The Revolution

Durante los últimos años la industria ha tomado de estandarte los géneros de mundo abierto y los FPS a tal punto de volverlos repetitivos, con grandes fallas y sobre todo genéricos. Homefront: The Revolution lamentablemente sufre de todo eso, originalmente en manos de THQ hasta la muerte de la compañía pasaba a manos de Deep Silver, Crytek y finalmente Dambuster Studio quienes vivieron un infierno con la que parece ser, de las franquicias más malditas que hay actualmente y es que, después de tantos retrasos, pasar de manos entre estudios y demás problemas era muy obvio que Homefront: The Revolution tendría muchos errores, acompáñame en esta reseña y descubre lo bueno y lo malo de este nuevo Homefront.

Historia

Estados Unidos de América, corre el año 2029 y Corea del Norte se ha apoderado del país por completo, dicha invasión comenzó años atrás cuando los norcoreanos comercializaron la mejor tecnología para la vida común como son smartphones, pantallas y demás aparatos que al poco tiempo se volverían vitales para los norteamericanos.

Con el paso del tiempo las relaciones diplomáticas mejorarían a tal punto de que el país asiático proveería de armamento especializado a la milicia americana y así, poco a poco irían endeudando a dicha nación hasta que un día se apoderarían de todo gracias a un ataque coordinado donde toda la tecnología y armas coreanas fallarían, dejando al país más poderoso sin nada con que defenderse obligando al país a pedir ayuda de… ¡Corea del Norte!.

Y así fue como América cayó y obtuvo un gobierno de mentira, un régimen militar y la erradicación de libertad que tanto celebraban. Sí, ya sé que el plan para apoderarse del mundo es de lo más rebuscado y parece que se le ocurrió a un villano de James Bond pero al final del día es la historia que presenta Homefront: The Revolution como preámbulo a la historia que se juega la cual, es otra campaña genérica digna de Call of Duty.

En la campaña tomamos el rol de Ethan Brady un nuevo recluta de la resistencia que por obra del destino es capturado y rescatado por el líder de la organización a quien deberá salvar después con ayuda de otros personajes genéricos como son… el soldado buena onda, el médico con problemas morales que ve primero por el bien y luego por la causa, la chica punk sádica con gustos ambiguos, ah y claro, ¡el personaje que desde el primer momento sabes que te va a traicionar!. Al final es una historia predecible y genérica que solo esta ahí para darte una razón para salir y cumplir las misiones.

Presentación

Después de morir THQ, Homefront: The Revolution pasó a manos de Crytek quienes modificaron su desarrolló para acoplarlo al CryEngine con el cuál se marco otro rumbo en el juego que, paso seguido, dio camino a que Deep Silver adquiriera la IP y con ella parte del equipo de Crytek creando Dambuster Studio para seguir con el juego y no tener problemas con el desarrollo de dicho motor gráfico.

Lamentablemente los cambios de equipo y el llamado infierno del desarrollo convirtieron al CryEngine en un enemigo del juego, pues el estudio no supo como apoyarse para que el motor se luciera y en cambio obtenemos un juego que constantemente varia en la tasa de cuadros por segundo dependiendo de la zona así pues, podemos tener escenas de tiroteos donde los 60 fps son estables y otras más donde la fluidez puede caer hasta los 30 cuadros que si bien es jugable sí es muy notorio y molesto ver como el juego va perdiendo fluidez mientras que, del lado de texturas debo mencionar que hay ocasiones donde no cargan por completo.

Es lamentable que uno de los motores gráficos más poderoso sea un lastre para este juego y más porque el ambiente creado para Homefront es muy bueno, ver una Norte América caída y distópica es impresionante mientras no estés metido en un tiroteo. La versión que probamos fue de PC en una máquina con 4GB de GPU y un procesador i7 por lo que no debería de dar tantos problemas pero ni bajando las especificaciones mejora demostrando que es error de los desarrolladores.

Otro punto es su banda sonora o mejor dicho, la ausencia de una; quien haya probado el Homefront original sabe que su OST es bueno mientras que en este remake tenemos un soundtrack que peca de minimalista, se pierde rápidamente y solo te concentras en el retumbar de las balas o las voces de tus compañeros pues la música pasa a tal término que podría ser de igual importancia que la melodía de un elevador.

Jugabilidad

Por parte de la jugabilidad tenemos un juego de disparos en primera persona que se une a un juego de mundo abierto donde deberemos movernos para ir descubriendo zonas, liberando puntos importantes y creando conciencia entre los ciudadanos para incitar a la revolución que salvará al país.

Aquí tenemos la parte más importante de Homefront: The Revolution pues el incitar a la revolución haciendo misiones tanto principales como secundarias es la clave para ganar, para su mala suerte volvemos a toparnos con otro muro pues las mecánicas de juego son poco claras y puedes comenzar haciendo una misión principal y en el camino terminar de liberar puntos estratégicos que ni siquiera estabas buscando o incluso comenzar o terminar otra misión secundaria que nunca supiste como se activo.

No hay nada orgánico en las mecánicas de Homefront, el cambiar de armas solo intercambiando una parte de tu arma es buena idea hasta que te encuentras con munición limitada en un tiroteo, ahí descubres que en realidad es una mala idea pues entorpece el no poder cambiar de arma tan rápido y ni hablar de la puntería que se puede volver loca en un instante, a todo esto hay que añadir que el juego ofrece un estilo de sigilo que te puede salvar de tiroteos a menos que tengas acompañantes de la IA, esos últimos solo saben disparar a lo idiota y crear tiroteos infinitos pues el juego despliega más y más enemigos dejando al final un panorama de cuerpos muertos por todo el escenario, todo sin sentido alguno y con la única solución de salir corriendo o terminar la misión, sea cual fuere claro.

Por último tenemos la opción de conducir un vehículo, esta mecánica viene heredada del pasado de Crytek con el original Far Cry, lamentablemente tiene el mismo problema de aquella franquicia y es que sus dinámicas de conducción son pésimas, marean y molestan en la experiencia, con el paso del tiempo optas por caminar y escapar de los enemigos en vez de tomar una moto, por más tardado que esto sea, es mejor a estar chocando con todas la barricadas que encuentres en el camino.

Conclusión

Mediocre y genérico son las palabras que mejor representan a Homefront: The Revolution, un título que coquetea ya con un trabajo mal hecho en todos los aspectos. Es una pena que este sea el juego debut para Dambuster Studios pero la verdad es que no hay nada nuevo que en realidad pueda ser rescatado pues por cada dinámica interesante hay errores que la echan a perder. En mi opinión no deberías perder el tiempo con Homefront: The Revolution, franquicia que ya debe morir pues ambos juegos han sido bastante regulares y con esta entrega es mejor olvidarla y enterrarla.


@darkmonstr opina sobre la versión de PlayStation 4:

Creo que mi compañero Omar ha mencionado todo, a lo que básicamente podría agregarle unos cuantos puntos. En primera instancia las pantallas de carga son una agonía total, son tan largas que a veces me la pasaba viendo otra cosa en el celular y perdía el interés en el juego.

De igual manera están los puntos de guardado, hasta donde recuerdo muchos juegos utilizan la mecánica de auto guardado y te mencionan «que mientras aparece tal ícono no deberías apagar la consola ni cerrar el juego», sin embargo, Homefront: The Revolution a pesar de indicarte eso, no lo lleva a cabo del todo, pues cuando te encuentras en la tienda para adquirir piezas de armas, armadura y vender objetos, al momento de salirte de este apartado, el juego se congela totalmente por varios segundos, y por varios no me refiero a dos o tres, me refiero a más de diez.

A pesar de todas las actualizaciones que ha recibido, estos problemas no han sido resueltos, y no veo la luz al final del camino para que lo reparen. Todas las malas experiencias en conjunto hacen que el juego resulte una muy mala experiencia jugable.


Agradecemos a Deep Silver las facilidades prestadas para poder realizar esta reseña. Este escrito se basó en una copia de PC, pero el juego también se encuentra disponible en PlayStation 4 y Xbox One.

Deja un comentario