Mad Max: Fury Road

George Miller nos trae una película post-apocalíptica en donde las leyes del hombre ya no rigen un mundo de paz y en su lugar, la sangre, el fuego y la lucha por el petróleo y el agua son los elementos que marcan la vida de los pocos supervivientes de aquel devastado mundo.

Varios años después de una serie de calamidades que afectaron al mundo, Max sigue intentando superar ls muerte de su esposa, hija y conocidos, mientras se ve atrapado en un conflicto terrenal liderado por el tirano Immortan Joe y como su mano derecha Imperator Furiosa.

Mad Max: Fury Road es un claro competidor a llevarse la corona de las películas del verano, y es que su competidor mas fuerte que fue Avengers dejó con opiniones muy divididas al público. Mad Max te pone de lleno en la acción desde el momento en que el inicia, sangre, explosivos, adrenalina y mucha arena son testigos de un inicio tan épico como el resto de la película.

Una combinación perfecta entre historia relatada a base de pocos diálogos y de una definición extraordinaria de cada personaje a lo largo del filme hacen pensar que incluso Fury Road podría ser una película muda y aún así, seguir siendo igual de buena. El vestuario y escenografía complementan este agasajo visual a lo largo de dos horas, los detalles han sido bien cuidados y la fotografía en una película de acción hace darnos cuenta que con un buen manejo de todos los elementos podemos construir un universos completo y salvaje con una iconografía muy madura.

No puedo concluir sin antes mencionar que Miller demuestra que la mujer es igual de importante en una película de acción como en cualquier otra, el director rompe con el paradigma del superhéroe estilo saiyajin para demostrar que el poder femenino también puede ocupar ese lugar y tener un papel muy importante en la película.

Mad Max Fury Road combina perfectamente todos los elementos que ningún director ha sabido manejar en los últimos años: música, vestuario, fotografía, acción, historia y manejo de cámaras que tu sumergen en un ambiente vivo a lo largo de 120 minutos, una película que sin duda tienes que ver este verano de 2015.


Este audiovisual representa únicamente la opinión de su autor y no necesariamente la del equipo de Versus Media.

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