En 2018, jugar videojuegos obsesivamente podría conducir a un diagnóstico de un trastorno de salud mental, esto debido a que en la versión beta de su próxima undécima Clasificación Internacional de Enfermedades, la Organización Mundial de la Salud incluye el «desorden de juego» en su lista de condiciones de salud mental.
La OMS define el trastorno como un patrón de conducta «persistente o recurrente» de «gravedad suficiente como para producir un deterioro significativo en las áreas personales, familiares, sociales, educativas, ocupacionales u otras áreas importantes de funcionamiento». El trastorno se caracteriza por un «control alterado» con una prioridad cada vez mayor dada a los juegos y la «escalada», a pesar de las «consecuencias negativas».
El videojuego, ya sea en línea o fuera de línea, debe ser «normalmente evidente durante un período de al menos 12 meses» para realizar este diagnóstico, de acuerdo con la guía del borrador. Sin embargo, si los síntomas son severos y se cumplen todos los requisitos, los profesionales de la salud pueden incluir a personas que han estado jugando durante períodos más cortos, dice el borrador.
Gregory Hartl, vocero de la OMS, dijo que la nueva entrada de ICD-11 sobre el trastorno de juego «incluye solo una descripción clínica y no opciones de prevención y tratamiento». Hartl describió el ICD como la «base para la identificación de tendencias y estadísticas de salud a nivel mundial y el estándar internacional para informar enfermedades y condiciones de salud. Es utilizado por médicos de todo el mundo para diagnosticar enfermedades y por investigadores para categorizar condiciones «.
Chris Ferguson, profesor de psicología en la Universidad de Stetson en Florida, cuyos intereses de investigación incluyen los videojuegos y otros efectos de la violencia en los medios, describió el ICD como «el libro de enfermedades reales por las que puede obtener pagos de seguros».
«Las personas que tienen centros de tratamiento para la adicción a los videojuegos o un desorden de juego ahora podrán recibir un reembolso», dijo Ferguson. «En el pasado, no lo hicieron. Será una bendición financiera para esos centros».
Lo que hay que tener en cuenta es que la versión de la OMS se basa en si el juego interfiere con las actividades de la vida real; por ejemplo, si su juego significa que no está haciendo la tarea o cepillándose los dientes.
El trastorno de los juegos en Internet es «totalmente diferente» del desorden de juego propuesto por la OMS, dijo Ferguson, y esto «refleja la confusión». La Asociación de Psiquiatría y la OMS «no les gusta estar demasiado separados» en sus descripciones de los trastornos mentales, dijo.
El «trastorno de los juegos de Internet», como lo describe la Asociación de Psiquiatría, ha sido «muy, muy criticado», dijo Ferguson. La versión de DSM del trastorno del juego se basa en el trastorno por abuso de sustancias, explicó Ferguson. Por el contrario, la versión de la OMS se basa en si el juego interfiere con las actividades de la vida real.
Ferguson cree que hubiera sido mejor si la OMS hubiera tomado más tiempo y hubiera contactado con estudiosos escépticos, los propios jugadores, algunas de las compañías que hacen juegos -todas las partes interesadas invertidas- antes de formular su descripción del desorden de juego.
Y mientras la OMS trata de hacernos creer que es una «enfermedad» los gamers, hacemos colectas para luchar contra enfermedades reales y ayudarnos unos a los otros… la opinión final, es tuya.
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