Super Mario Odyssey

En 1996 con el lanzamiento del Nintendo 64 llegó la aventura que revolucionaría los videojuegos al ser el primer juego de plataformas en 3D y que estableció un nuevo arquetipo para el género gracias a su forma de juego, totalmente libre, y el formato de sus gráficos 3D poligonales mezclados con sprites bidimensionales.

En 2017, y meses después de recibir la nueva consola de Nintendo, recibimos Super Mario Odyssey, el juego que en lo personal, hizo que no quisiera esperar más y me comprara un Switch antes de que acabara el 2017. Después de haber acabado la nueva aventura de Mario, ¿realmente ha valido la pena salirse de la zona de confort?

Historia

La historia de los juegos de Mario siempre se basa en un solo argumento: Peach ha sido raptada por Bowser y Mario tiene la misión de salvarla. Sin embargo, en Super Mario Odyssey, las cosas han cambiado un poco, ya que ahora Bowser no solamente ha raptado a la princesa, sino que está enamorado y ha decidido casarse con ella.

Mario, un loco enamorado de la princesa, está dispuesto a atravesar el mundo con tal de salvar a la princesa y ser él quien lleve a Peach ante el altar, pero justo cuando está a punto de evitar que Bowser se la lleve, el ex-fontanero lo enfrenta en una pelea en la cual termina derrotado, y lo peor, con su icónica gorra destrozada.

Posterior a esa derrota, Mario cae en un lugar llamado Cap Kingdom, un mundo plagado de gorras mágicas que ha sido atacado por Bowser y que a su vez ha raptado a una de las habitantes de dicho reino para que Peach la use como tiara en la boda. Los habitantes de este mundo piden la ayuda de Mario para salvar el Cap Kingdom y acabar con el terror que Bowser está ocasionando, y para ello, uno de los habitantes, llamado Cappy, se convierte en el fiel compañero de Mario tomando la apariencia de su icónica gorra.

A lo largo del juego visitaremos diversos mundos plagados no solamente de ambientes diferentes, sino que también iremos salvando a cada uno de los reinos que Bowser ha invadido para tomar algún objeto necesario para la boda, por ejemplo del Wooded Kingdom ha robado flores, y lo mismo sucede con otros reinos.

La historia es divertida, sobretodo porque deja ver un lado raro en el universo de Mario, un Bowser enamorado y dispuesto a hacer todo por llevar a Peach al altar. Es divertida cada una de las cinemáticas que vemos a lo largo del título y además, conocer a los nuevos secuaces de este ya bien conocido enemigo.

Presentación

Super Mario Odyssey es simple y sencillamente hermoso. Después de jugar The Legend of Zelda: Breath of the Wild y darse cuenta de los grandes errores que el juego tiene en cuestión de optimización, me es asombroso ver como Super Mario Odyssey es tan perfecto a nivel visual, que a pesar de contar con un número mayor de polígonos en pantalla, no sufre las ralentizaciones que Breath of the Wild tiene.

Los mundos son variados y algunos resultan familiares, como el de nieve o la playa, pero también tenemos algo más elaborado como Donk City donde insisto, se nota la optimización del juego. Una ciudad que al inicio está plagada de lluvia y oscuridad debido a una falla eléctrica, pero que posteriormente nos muestra todo su resplandor una vez hayamos resuelto el problema.

Las vistas que nos ofrece Odyssey son sublimes, me encantó como se enfocaron hasta en los más pequeños detalles como las puertas de un coche en plena ciudad o aquel pedazo de alga en el fondo del mar en la playa. Los mundos no son los más grandes que hayas visto, pero están llenos de secretos para descubrir lo cual nos dará muchas más horas de jugabilidad.

La música es hermosa, y forma parte muy importante del juego, vamos, incluso Nintendo hizo una canción para promocionar el juego llamada Jump Up, Super Star! de la cual te platiqué en los Versus Awards 2017. Además no están excluidos los clásicos sonidos con los que hemos crecido a lo largo de los años con diversos títulos de Mario.

Jugabilidad

Super Mario Odyssey para mi, es la evolución de Super Mario 64, es una revolución al menos en lo que se trata de la franquicia en sí, pues ofrece una diversidad de nuevas opciones arriesgadas que no se habían visto en otros títulos del ex-fontanero.

Existe una variedad mayor de enemigos por conocer, y eso nos permitirá aprovechar la nueva habilidad de Mario: transformarse en diversos animales u objetos gracias a Cappy. Aunque, hay que dejar en claro que no cualquier cosa puedes transformarte. Esta habilidad nos permitirá avanzar a lo largo de los mundos e incluso alcanzar lugares que parecieran imposibles.

Para continuar, y sumado a la opción de transformarse, ahora Mario no solamente debe vestir su clásica ropa de fontanero, sino que también podrás adquirir una diversidad de trajes a lo largo de cada reino. Por ejemplo en el desierto puedes adquirir el traje de Mario Mexicano, con un zarape y un sombrero charro, en la playa podrás vestirlo en el mood veraniego con solamente un short o bien con un traje listo para echarse un chapuzón y practicar snorkel.

Los mundos se transformaran conforme avances, es decir, al vencer al jefe del mundo donde te encuentras, este se modificará en cierta medida para que puedas acceder a otras zonas que antes probablemente no existían. Es importante mencionar que la exploración es base para poder encontrar todas las lunas en los mundos, y si de plano alguna no logras encontrarla, siempre podrás pedirle ayuda a Toad explorador, quien conoce «de pies a cabeza» cada escenario y te dará una pista de donde podrás encontrarla.

Como habrás notado, en Super Mario Odyssey nuestro ex-fontanero no colecciona estrellas, sino más bien lunas. Para poder avanzar al siguiente nivel, nuestro sombrero-nave llamado Odyssey requiere de esas lunas para poder «repararse» y así avanzar al siguiente reino. No es necesario encontrar todas las lunas en un solo mundo para progresar con la historia, realmente el juego a veces te pedirá solamente cinco lunas o en el peor de los casos diez si la memoria no me falla, pero para ser sincero, encontrar esas diez no te tomará demasiado tiempo.

Pero hay una cosa en particular que amé de Super Mario Odyssey y es el factor nostalgia. Los mundos tienen un pequeño easter-egg donde encontrarás lunas también, y es la posibilidad de acceder a una pared que convertirá a Mario en aquel personaje 2D que conocimos en los 80s, y explorarás un pequeño escenario con el mismo estilo hasta alcanzar la estrella. Es algo que personalmente me agradó mucho y es un toque diferencial al mundo 3D que exploramos.

Pero hay algo más nostálgico todavía, y solamente diré que tiene que ver con Super Mario 64. No mencionaré más porque mi buen @Tyrwar dirá que estoy dando spoilers.

Para terminar, no solamente explorando y venciendo enemigos podrás encontrar lunas a lo largo del título, sino que también existen otras actividades a realizar. Por ejemplo, en la ciudad, Mario puede unirse a un concurso de salto de cuerda, si obtienes una puntuación mayor a los 20 saltos, obtendrás una estrella, pero además, tu récord será mostrado en una tabla de ranking a nivel mundial, ¿buen reto no?. Otra opción es jugar voleibol en la playa con los residentes de dicho reino.

Conclusión

La exploración, las posibilidades de transformación con Cappy, los diversos trajes que puedes obtener, e incluso encontrar un promedio de 50 lunas por mundo son solo algunos de los principales pilares por lo que creo fielmente que Super Mario Odyssey debe llevarse el galardón a Game of the Year. La música, el arte, las vistas panorámicas, y un sin fin de cosas más hicieron que disfrutará y siga disfrutando cada segundo de este título.

Un juego que para mi, es la revolución que significó Super Mario 64 hace más de 20 años.