Soulblight presenta su exclusiva mecánica de manipulación. Mientras viajas a través de la realidad destrozada del Santuario, recibirás rasgos de personalidad basados en tus elecciones.
Estas serán la principal fuente de tu fortaleza. Para aprovecharlos, deberás actuar en consecuencia. Convertirse en un alcohólico significa que serás recompensado por emborracharte, pero a partir de ese momento, estar sobrio puede resultar insoportable. El juego hace una pregunta importante sobre tus límites morales: la gula, la lujuria, el canibalismo: ¿hasta dónde estás dispuesto a llegar para sobrevivir?
En Soulblight, antes de ingresar a cada nivel del Santuario, debes elegir una Mancha que represente un cierto rasgo de personalidad. Esa elección dará forma a sus experiencias futuras: cada dolor desbloquea una nueva forma de obtener poder: un mecánico personalizado diseñado para fomentar el juego de roles.
La mecánica de la corrupción canaliza tu voluntad para sobrevivir en acciones que están alineadas con la personalidad de tu héroe. Por ejemplo, Greed Taint te castigará por pagar de más, pero al mismo tiempo, te ayudará a hacerte más fuerte cuanto más rico seas. The Hoarder Taint te otorgará una penalización de «sentido de pérdida» cada vez que pierdas un artículo, pero al mismo tiempo, aumentará tu bonificación pasiva cuanto más variadas sean tus pertenencias. Esto significa que el juego realmente te alentará a realizar juegos de rol según los Taints que hayas elegido, en lugar de recompensarte por moler.
A medida que profundizas en el Santuario, podrás agregar más Manchas a la personalidad de tu personaje, haciendo que los niveles cambiantes de la mazmorra en sí sean una especie de árbol de habilidades. Sin embargo, con cada nueva Mancha, estás un paso más cerca del punto de no retorno. ¿Seguro que sabes dónde está?
Soulblight ya está disponible en Nintendo Switch.
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