La historia de Henry es cautivadora y llena de humor, drama e intriga. Algo que experimentaras tanto en las misiones principales, como en el montón de historias secundarias que hay por el mundo. Las cuales tendrás que buscar a conciencia, ya que mucho contenido es perfectamente opcional, y los desarrolladores no tienen miedo a dejarte perder contenido si así es como quieres jugar tu partida.

Es cierto que la barra de entrada es algo alta para los no iniciados. Una década de mundos abiertos que tratan a sus mapas como simples listas de cosas por hacer, nos han mal acostumbrado a solo ir de un punto a otro sin prestar mucha atención a nada; solo recoger loot y seguir el ciclo. Es esta tendencia lo que hace sentir a KCD2 como algo fresco. Las cosas están ahí, pero debes de buscarlas, para vivir este mundo debes de interactuar con él en sus términos; y dejar que te envuelva.