Desarrollado en estrecha colaboración con los dentistas, Y-Brush es el próximo cepillo de dientes eléctrico de generación capaz de cepillar los dientes eficientemente en sólo diez segundos.
Un concepto simple de explicar, pero que requirió cerca de cinco años de investigación y desarrollo y está bajo la protección de varias patentes. Y-Brush es el único producto en el mercado que utiliza cerdas de nylon en lugar de que las tiras de silicona, asegurando así una mejor eficiencia a un uso correctamente el cepillo de dientes regular.
Además de la formación de caries y gingivitis, la mala salud bucal puede causar la pérdida de dientes y puede tener amplias repercusiones en la salud general a largo plazo. Muchos estudios muestran cómo se puede relacionar con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, cáncer de garganta, diabetes, enfermedades pulmonares, osteoartritis, etc.
El funcionamiento del Y-Brush es similar al de un cepillo de dientes eléctrico normal: un mango transmite vibraciones a un cepillo de cerdas de nailon que, a su vez, se mueve de tal manera que limpia eficazmente los dientes, las encías y la línea de las encías. Las vibraciones que proporciona el dispositivo se basan en frecuencias sónicas específicas.
El cepillo utiliza las cerdas de nylon y las vibraciones para una máxima eficiencia. De hecho, estas tecnologías han demostrado ser las más eficaces. A diferencia de las tiras de silicona y otros materiales que han sido probados, las cerdas de nylon son lo suficientemente finas como para llegar entre los dientes, produciendo así una limpieza profunda y una cuidadosa eliminación de la placa dental.
El carácter innovador del producto proviene del propio cepillo. El cepillo tiene la forma de una Y que permite una cobertura completa de todos los dientes. En lugar de cepillar diente por diente, faceta por faceta como con los cepillos de dientes manuales o eléctricos normales, el dispositivo cepilla todos los dientes superiores simultáneamente durante 5 segundos, y luego los inferiores durante cinco segundos.
Cuando usamos un cepillo de dientes regular, pasamos menos de cuatro segundos por diente (Ver cuadro de tiempo de cepillado y número de dientes). Con el cepillo, todos los dientes se cepillan al mismo tiempo y durante cinco segundos cada uno. Por lo tanto, el tiempo de cepillado de los dientes se divide por doce sin perder eficacia.
En realidad, el proceso puede considerarse más eficaz, ya que podemos considerar que el tiempo dedicado a cada faceta del diente se multiplica por cuatro y podemos estar seguros de que la técnica correcta se repite en cada uso del dispositivo, ya que el método Bass está automatizado.
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