En días anteriores les comentamos de la pequeña gran verdad de Apple: ha hecho tus dispositivos más lentos con cada actualización de software, y lo ha hecho a propósito.
Apple ya ha sido notificada de ocho demandas colectivas por parte de usuarios que aseguran que la baja en el rendimiento se debe a un defecto en la fabricación del iPhone, el cual afecta la experiencia de uso y donde la batería no es capaz de soportarlo. Siete de estas demandas son en diversas regiones de Estados Unidos y una proviene de Israel.
Hasta este momento y después de haber confirmado la ralentización, Apple no ha mencionado nada más acerca de este caso. Las demandas incluso hacen alusión por fraude o de «la incapacidad de las baterías para manejar la carga de trabajo creada por las velocidades del procesador», e incluso algunos exigen que Apple cambie las baterías de forma gratuita, ya que se trata de «un defecto que la compañía ha tratado de enmascarar».
Por otro lado, Chris Hoofnagle, director de la facultad del Centro de Derecho y Tecnología de Berkeley, dice que Apple no hizo mal, ya que la demanda raya ligeramente la ley de protección al consumidor, que habla del envejecimiento de los productos electrónicos, lo que permite que algunas compañías hagan ajustes en sus productos alegando posibles fallos de seguridad.
Deja un comentario