La saga Souls es una de mis favoritas y en este EGS no pude perder de vista el puesto de Bandai Namco, quien traía la más reciente entrega del inmisericorde juego creado por el señor Miyazaki. Lo primero que pude notar en cuanto al sistema de juego es el ritmo, sin duda algo se ha pegado de Bloodborne, pero para nada siento que sea algo malo. El ritmo es mas rápido, los enemigos son mas ágiles y en general todo va a una velocidad que no llega a la del juego antes mencionado, pero tampoco es igual a los otros títulos. Me ha gustado, todo se siente mas vertiginoso, pero aquí no puedes depender del esquive todo el tiempo, usar el escudo era muy necesario pese a todo y sin duda me costó volverme a acostumbrar.
Respecto a cuestiones gráficas, que más decir… se ve hermoso, un juego de luces asombrosa y una calidad de texturas brutales en esta demo, la cual estaba corriendo en una PS4. La locación me recordó bastante a ese mítico tutorial de Demon’s Souls, lo cual ya se ganó por si solo varios aplausos de nostalgia. En rendimiento no sentí ninguna ralentización fuerte en ningún momento, aunque recuerdo un tirón en algún punto con muchos enemigos y fuego. Solo espero que el rendimiento mejore y los visuales no bajen, porque este ha sido un viaje delicioso para la vista.
Un poco después de mi paso por el juego tuve la oportunidad de hablar con gente involucrada en el desarrollo, quien nos contó algunos detalles más específicos sobre el juego. Por mi parte solo quiero ver que tanto cubrirá nuestras expectativas esta nueva entrega, porque si todo sale bien, será una memorable…
Dark Souls 3 estará disponible en algún punto de 2016.
Este escrito representa únicamente la opinión de su autor y no necesariamente la del equipo de Versus Media.
Agradecemos a Bandai Namco las facilidades para asistir a este evento.
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