El explorador interestelar Milo tiene un pequeño problema. Es decir, su problema es ser pequeño. De unos dos centímetros de altura, para ser exactos. Y por si fuera poco, está atrapado en el pasado (en los años 90, si queremos ser específicos), y la población local de insectos ha ido a descubrir la religión. No está seguro de que esto último sea un problema, pero es ciertamente extraño.
Bienvenido al extraño y maravilloso mundo de Tinykin, del editor tinyBuild y los desarrolladores Splashteam. Acompaña a los codirectores Romain Claude y Marie Marquet en un viaje relámpago por sus enormes entornos en miniatura en el siguiente vlog de desarrollo para echar un primer vistazo a lo que llegará a PC y consolas este verano.
Inspirado en clásicos del género como Pikmin y Paper Mario, así como en los dibujos animados del sábado por la mañana de los años 90, Tinykin es un juego de exploración ante todo. Cada habitación de la casa en la que Milo se encuentra atrapado es un enorme espacio explorable, con sus propias culturas, civilizaciones y problemas que resolver.
Ayudado por un enjambre de misteriosas pero útiles criaturas llamadas Tinykin, Milo emplea su fuerza para mover objetos enormes, construir escaleras para escalar y abrir nuevos caminos cuando la sutileza no consigue abrir nuevas puertas. No es que Milo flojee; es un prodigio de las plataformas, capaz de cruzar enormes huecos con su planeador de burbujas y de desplazarse por la casa haciendo surf sobre una pastilla de jabón.
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