Granblue Fantasy: Versus

Después de un lanzamiento en la región de Asia, Granblue Fantasy: Versus finalmente llega a nuestras manos este mes de marzo con una propuesta interesante en el apartado de juegos de pelea ofreciendo una cantidad de contenido considerable para brindarnos muchas horas de juego.

¿Listo para pelear por la paz en el reino?

Historia

Granblue Fantasy: Versus cuenta con un modo historia al cual han bautizado como modo RPG, que de RPG, solo tiene el nombre, literalmente.

A lo largo de cinco capítulos estaremos atravesando diferentes islas del reino para saber qué demonios está pasando con todos los amigos y conocidos de Gran, que, por alguna razón, ahora se han puesto la meta de atrapar a Lyria para cumplir algún propósito maligno, que no sabrás cuál es básicamente hasta el final de la trama.

La historia está decente, pero nada del otro mundo. Es entretenida hasta cierto punto, pero llega un momento en el cual los diálogos dejan de ser interesantes pues parece que la mecánica de llegar, desconocerte, pelear contra ellos y volverlos «buenos» se repite una y otra vez y los diálogos no aportan demasiado a lo que sucede, hasta casi el final.

Es una campaña que te dará un aproximado de seis horas y que al final te invitará a jugar en el modo difícil para continuar arriesgando el pellejo con la única finalidad de salvar al mundo. Algo a mencionar es que aunque no tengas idea de la trama previa, se brindan pequeños diálogos que tratan de empaparnos un poco de lo que ha sucedido.

Presentación

El juego maneja un estilo de dibujo a mano muy llamativo, desde la portada, las cinemáticas e incluso los personajes ya en la jugabilidad. Es un juego que realmente demuestra el gran cuidado al detalle que se le ha puesto para entregar un juego de alta calidad, aunque desafortunadamente también sufre de pequeños errores que hacen notorios los infames «dientes de sierra» en algunos y muy contados momentos.

El diseño de personajes es bastante bueno y hace diferenciar a cada uno de los que nos acompañan en esta aventura. Me quedo definitivamente con el diseño de Gran y de Metera, así como también con el hasta cierto punto perturbante diseño de Ladiva que debo admitir me sorprendió mucho, puesto que soy nuevo en la franquicia y realmente se me hizo muy grato ver como éste tipo de personajes son incluidos en los juegos, pero entiendo no es la primera vez que aparece.

El juego cuenta con un trabajo de voces en inglés y japonés, y aunque no hablaré de éste último, puedo decir que el trabajo realizado en inglés es bueno, y aunque a veces parece que no le impregnan la suficiente emoción a algunos diálogos, en general es un gran trabajo que merece la pena destacar.

El diseño de escenarios también es bueno y lo podemos notar principalmente en el modo campaña puesto que es donde más variedad y menos acción hay lo que nos permite disfrutar un poco más de los detalles que adornan los mapas y que a su vez le dan vida a todo lo que sucede en segundo plano, por ejemplo, una ciudad invadida donde hay soldados escondidos de las balas enemigas mientras a su vez hacen su parte contraatacando con sus armas.

La música creo que es de las cosas más memorables del juego de inicio a fin. Si bien algunas melodías en las batalla llegan a ser muy repetitivas, la gran mayoría de las canciones son sumamente buenas y llegan a lo épico en las batallas con los jefes. De hecho creo que la canción del inicio es de lo mejor, solamente opacada por la del final del modo campaña.

La navegación en general es bastante sencilla, aunque creo que el apartado de mejora de armas en el modo campaña no es lo mejor, sobretodo porque no queda muy claro cómo funcionan las mejoras, ni el porque tener tantas armas «elegidas», pero de eso hablaremos más adelante.

El juego cuenta con un amplio apartado de personalización que puedes ir adquiriendo con la moneda del juego, que no solo te sirve para mejorar tus armas, sino también para comprar diferentes sets de color de las mismas, así como de los personajes e incluso adquirir otras armas o skills para aumentar tu poder dentro del juego. Conseguir dinero  es tan fácil como jugar, y mientras más alta sea la calificación que obtienes por cada misión que completas, más dinero ganarás.

Jugabilidad

Granblue Fantasy: Versus cuenta con diversos modos de juego que buscan ofrecer muchas horas de juego más allá de solo ser un juego de peleas.

El primer modo es el llamado RPG, que como dije, de RPG solo tiene el nombre, pues básicamente es un modo 2D de peleas con momentos de beat ‘em up para poder progresar. A lo largo de los diversos capítulos tendremos que recorrer las islas del reino que a su vez tendrán diferentes misiones primarias y secundarias. Las primarias son las que tenemos que hacer obligatoriamente para poder avanzar y van desde eliminar una cantidad de enemigos, sobrevivir a una oleada de éstos durante determinado tiempo, hasta las peleas con los jefes y las llamadas incursiones que también son peleas con jefes. Las secundarias por otro lado son misiones que nos ayudan a conocer un poco más de los personajes secundarios del juego y además nos sirven como forma de loot.

Las batallas con los jefes son tal vez la parte más interesante del modo RPG debido a que son peleas donde el enemigo cuenta con una cantidad de vida muy alta además de la posibilidad de entrar en modo override lo que le permite hacer mucho más daño, al grado que tan solo con un golpe puede eliminarte por completo. Casi toda la campaña éstas batallas no resultan difíciles, salvo hasta el jefe final, en la cual, si no tienes las armas y skills adecuados, tal vez sufrirás de muchas muertes.

En cuestión de RPG, el juego solamente aporta el apartado de subir de nivel tanto las armas como a los personajes, y es que con cada batalla nuestros personajes, al menos aquellos con los que hayas acabado la misión en curso, ganarán experiencia y subirán de nivel. El nivel les permite ser más fuertes, pero tú no puedes subirles de nivel por tu cuenta, ni tienes un árbol de habilidades para mejorar, ni cualquier otro aspecto RPG necesario para llamarse RPG tal cual. Otro elemento a mencionar es que los personajes tienen un level cap que se va desbloqueando conforme terminas capítulos, y la idea al parecer, es que sigas jugando el modo campaña o torre para que llegues al máximo. Mientras más juegues con un personaje, más rápido subirá de nivel, y los otros, bueno, se quedarán estancados.

Las armas también suben de nivel, aunque a éstas si puedes aumentarlas a tu propio ritmo. El aumento de nivel de las armas depende de dinero y de ciertos ítems que vas coleccionando en el juego, es decir, podrías subirla de un solo golpe al nivel 40, pero para subir más allá, necesitarás shards para aumentarlo, y adicionalmente tiene que «liberar» su nivel máximo, ¿cómo?, otorgando armas idénticas como «canje», es decir, las deshaces para poder aumentar la otra. Adicionalmente las armas se dividen en diferentes tipos, como agua, luz, tierra, oscuridad, entre otras, que en teoría pueden ser las adecuadas para acabar con cierto tipo de enemigo, pero para ser sincero yo siempre usé la más fuerte en ese momento, independientemente del tipo que tenga, y casi siempre salí victorioso.

Un punto que quiero destacar del modo RPG es que nunca comprendí realmente la idea de tener un arma principal, y además tener otros diez slots en los cuales podía poner las armas que quisiera. Entendí que en conjunto, todas las armas hacían una suma de su ataque y HP y eso me permitía ser más fuerte, pero no comprendí sus efectos reales en la batalla, ni por el tipo que fuera, por ejemplo, combinaciones de agua, luz y tierra, ni siquiera porque al menos en algún momento me permitiera cambiar de arma o algo por el estilo.

Adicionalmente en la sección de RPG tenemos otro modo llamado Torre de Babyl en la cual debemos ir ascendiendo por los diferentes niveles de la misma, en tramos de cinco en cinco, de los cuales cuatro de esos simplemente servirán para eliminar enemigos de relleno, y el último será para enfrentar a uno de los personajes del juego. Es una forma adicional de subir de nivel a tus personajes y además de lootear.

Un modo similar a la Torre de Babyl es el modo arcade solo que la diferencia es que no tendrás que eliminar enemigos de relleno ni «subir», sino simplemente tendrás que pelear y ganarle a los diferentes personajes del juego. Algo interesante es que si elegiste al principio jugar en dificultad normal, al final de cada pelea podrás elegir subir o bajar una dificultad, por ejemplo bajar a fácil o subir a difícil, con la finalidad de que puedas ir mejorando tu desempeño.

Granblue Fantasy: Versus se completa del modo PvP local para que te agarres a guamazos con tus amigos así como del modo online que, antes de entrar, te pedirá hacer unas luchas de práctica para que te puedan asignar un nivel de ranking y basado en eso puedas enfrentarte a gente de tu misma capacidad.

Tenemos una cantidad muy pequeña de personajes y eso es tal vez la parte más mala del juego, con poco más de diez personajes solamente para elegir, y si bien a nivel visual pueden ser decenas, los cosméticos no afectan la jugabilidad ni mucho menos las técnicas de los personajes.

El juego es muy accesible con los jugadores en general pues se basa en combinación del gatillo R1 junto a triángulo, cuadrado o círculo para hacer ataques fuertes o de presionar solamente equis para hacer ataques normales. La barra de energía nos sirve para ejecutar las habilidades especiales de los personajes y la combinación de botones es de dos o tres, dependiendo de que ataque quieras realizar. Lo anterior hace que el juego sea mucho más casual aunque también significa que probablemente no podrás hacer tan fácil aquellos combos de ensueño… o tal vez sí.

Conclusión

Granblue Fantasy: Versus es una buena entrega en un género nuevo para la franquicia. Es lamentable que el RPG solo lo tenga de nombre en la campaña y muchos fans seguramente se sentirán timados por el argumento, sin embargo, si hablamos en general del contenido que tiene para ofrecer el juego, es un título que sin duda tienes que probar.

Agradecemos a XSEED Games las facilidades para realizar esta reseña.