Sea of Thieves

Rare está de vuelta, pero en esta ocasión no con una de sus más grandes IPs como lo fue Conker, sino más bien con algo totalmente diferente a lo que habían hecho hasta el momento, una aventura en el océano que nos llevará a conocer diversas islas y aventurarnos en la vida sobre las olas.

¿Estás listo para ser un pirata?

Historia

Sea of Thieves no cuenta con una historia tal cual, de hecho, mucho menos con una campaña que nos invite a conocer un argumento predeterminado, por otro lado, nos invita a tomar la piel de un pirata y ya sea solo o en compañía, empezar a forjar nuestra historia en el océano.

El juego nos permitirá elegir a un personaje creado al azar de una diversidad considerable, y el cual será nuestro avatar dentro de un mundo plagado de otros piratas que buscarán lo mismo que tú: riqueza o bien, eliminarte.

El juego basa su pseudo campaña en una serie de misiones que tenemos que realizar para poder subir de nivel y progresar en este mundo, más sin embargo, y mencionar de nuevo, no hay un argumento que sostenga al título en sí.

Presentación

El juego es, me atrevo a decir, probablemente de lo más hermoso que he visto en la consola en los últimos meses. Los paisajes son sin lugar a dudas sublimes y con un manejo de contrastes entre luz y sombra que se hacen notar mucho más tanto en el atardecer, así como también durante las noches, haciendo que los paisajes cobren vida y hasta parezcan escenarios diferentes cuando los vemos de día y de noche.

La paleta de colores es también bastante buena y cuentan con un diseño de interfaz muy accesible aunque un poco complicado de usar debido a la falta de instrucciones del juego. Personalmente me costó un poco de trabajo adaptarme al esquema de controles pero eso es algo totalmente personal.

El diseño de los personajes es relativamente variado al inicio, sin embargo hay que mencionar que conforme subas de nivel y adquieras mayores riquezas, entonces se te permitirá poder adquirir una serie de cosméticos que te ayudarán a personalizar a tu personaje a tu gusto. Éstos incluyen desde ropajes hasta armas, y la variedad vaya que es amplia, aunque claro, el poder adquisitivo que tengas dependerá enteramente de cuanto tiempo le inviertas al juego.

La música es totalmente ambiental pero bastante buena, es de aquellas que podrías escuchar en un día relajado en la oficina mientras trabajas y simplemente no te aburrira. Los sonidos también son buenos, desde los que emiten los personajes, hasta incluso el de una pala entrando en la arena para poder encontrar el cofre, y más aún cuando se escuchan los disparos de los cañones desde el barco. Esos pequeños detalles son los que hacen que Sea of Thieves resulte mucho más agradable.

El diseño de los escenarios que en esta ocasión son islas es muy bueno, y tenemos de igual manera una variedad considerable para visitar. Sin embargo, llega un momento en el que éstas islas ya no son suficientes y tener que visitarlas una y otra vez… se convierte en algo repetitivo y aburrido.

Jugabilidad

Sea of Thieves nos invita a tomar el papel de un pirata y nuestra misión será principalmente ser todo un éxito en el mar, no solamente al completar misiones, sino también en sobrevivir a los atracos de otros piratas.

Una vez iniciemos el juego podremos elegir que tipo de aventura queremos iniciar, si en un barco grande que será tripulado por ti y tus amigos, o en su defecto, gente que se conecte al servidor, o bien, si incluso quieres lanzarte a una aventura en solitario. Las diferencias radican precisamente en el tamaño del barco que tripularás y si podrás o no contar con alguien que te vigile la espalda en un atraco.

Cuando lleguemos a la isla principal podremos visitar una serie de tiendas distribuidas en la zona que nos permitirán tomar misiones para hacer a lo largo de la aventura, por ejemplo, ir en la búsqueda de un tesoro o incluso, entrar en batalla naval contra otros barcos. Desafortunadamente seguimos teniendo muy poca variedad de actividades para hacer, y aunque juegues solo o en grupo, llegará un punto en que todo se convierta en algo repetitivo. Afortunadamente Rare ha confirmado que tendremos «más actividades» pronto, y esperemos no se tarden mucho.

Una vez elijamos las misiones que haremos será el momento de abordar el barco y zarpar hacia los mares. Si elegiste un barco grande, lo ideal será que entre todos los tripulantes hagan las tareas necesarias para poder empezar, por ejemplo, levar el ancla y soltar las velas, así como también elegir el destino final y por supuesto, dirigir el barco con el timón. Si por otro lado tienes un barco pequeño, las mecánicas son básicamente las mismas, salvo que serás tú quien tenga que hacer todas las actividades previas.

En algún momento podrás encontrarte con otro barco y será tu decisión si atacar o simplemente huir, aunque claro, ellos siempre podrán tomar esa decisión por ti. La idea será prácticamente lograr hundir el barco enemigo con los cañones que tendrás que ir recargando cada que se te acaben las bolas de cañón, pero también es necesario eliminar a los tripulantes. Hay que mencionar que si logras hundir el barco en una isla lejana a la base, entonces el enemigo estará en un gran problema.

Al completar misiones como por ejemplo encontrar un tesoro enterrado, el cofre deberás llevarlo de nuevo al barco y a su vez, a la isla principal, esto para que el NPC correspondiente pueda validar y darte las recompensas correspondientes. Incluso podrás encontrar objetos que a su vez podrás vender para obtener mayores ganancias.

Otra de las actividades que tenemos son una especie de raids, en las cuales deberemos controlar fortalezas que se encuentran distribuidas a lo largo del océano. En estas misiones especiales nuestra misión será acabar con hordas de enemigos, sin embargo, aquí es donde se hace más evidente el gran problema del juego: no hay un progreso real de lo que haces, independientemente de las horas que le inviertas. Es decir, puedes haberle dedicado decenas de horas y al final, tu ataque o defensa será del mismo nivel que alguien que recién inició. Ese detalle también aplica para los enemigos, pues no porque ya tengas «mejores» armas, significa que harás más daño, de hecho, todo el progreso se convierte en algo meramente estético.

Lamentablemente, eso es todo lo que tenemos que hacer en Sea of Thieves, y aunque al inicio puede resultar divertido por ser algo «nuevo», personalmente me resultó frustrante cuando me aventuré en solitario, y esto es porque después de lograr encontrar los cofres y completar mis misiones, otros personajes simplemente llegaron, me mataron, destruyeron mi barco y se quedaron con todo… pero vamos, todos somos piratas… ¿realmente hubiera sido bueno que este tipo de actividades no se permitan dentro del juego? creo que no.

Algo a destacar sobre el relato anterior es que Rare incluyó una jaula en la cual podríamos encerrar a un enemigo que hasta cierto punto nos haya causado mucho enojo al grado de ser considerado «tóxico», sin embargo, esto al parecer es algo difícil de lograr.

Conclusión

Sea of Thieves es un juego divertido, jugando en solitario o jugando en compañía con amigos. No puedo asegurar que sea divertido jugar con desconocidos porque a veces será difícil lograr llegar a un acuerdo sobre qué hacer y cómo hacerlo, aun cuando todos tengan micrófono y la comunicación sea ideal.

Es un juego muy bonito a nivel visual y con una gran idea que se llevó a cabo de manera correcta, pero que desgraciadamente le faltó variedad en contenido para lograr mantener a sus jugadores mucho más tiempo.

Agradecemos a Microsoft las facilidades para realizar esta reseña.