Dream Alone

Los juegos indie en algunos casos siguen tratando de innovar, no sólo en el arte o en lo que se inspiran, sino también en la jugabilidad, y como algunos otros casos de los que te hemos hablado aquí en Versus, hoy te quiero contar detalles de Dream Alone.

¿Listo para un juego raro pero sobretodo estresante por el estilo de arte que maneja?

Historia

Dream Alone nos lleva a conocer un triste cuento de hadas en el que una misteriosa enfermedad arrastra a través de una aldea que alguna vez fue agradable, enviando a sus desafortunados habitantes a un coma profundo.

Nuestro protagonista es un niño pequeño cuyos padres han sido víctimas de la enfermedad y debe aventurarse en la oscuridad desconocida de susurrar bosques, pueblos fantasmas y cuevas aulladoras para buscar a la mítica hechicera Lady Death, su única esperanza de encontrar una cura para esta malvada plaga.

La historia en realidad pasa a un segundo plano, no porque no sea interesante, sino porque el juego resulta complicado hasta cierto punto que olvidas totalmente el porque estás jugando y solo te ocupa el pasar la escena correspondiente.

Presentación

El juego está inspirado en películas expresionistas alemanas clásicas silenciosas en blanco y negro por lo que todo el arte ilustra un mundo inquietante a través del lente de la cámara en escala de grises, es prácticamente como si estuvieras viendo una película antigua y eso se demuestra de inicio a fin, debido a que la pantalla está plagada de aquellos «ruidos de cámara», por ejemplo, de repente todo queda oscuro o veremos pequeños detalles que invaden nuestra jugabilidad.

El diseño de personajes es muy básico pero afortunadamente va muy ad hoc a la época en la que toma inspiración el juego, de hecho podría decir que de alguna manera me recuerda a la familia Adams.

Los mundos, aunque son relativamente pocos, los escenarios que los conforman hacen que estos sean más variados no solamente en el fondo, sino con todos los elementos que lo adornan y que terminan siendo un reto para el jugador. Los escenarios no tienen lujo de detalle, de hecho en su mayoría son estáticos y cobran vida con los elementos antes mencionados.

Los sonidos escalofriantes fueron compuestos por Paweł ‘Fleczer’ Flanc y sirven como un gran complemento a la experiencia con melodías oscuras e inquietantes que harán que uno lo piense dos veces antes de apagar las luces. Es una de esas bandas sonoras que realmente transmiten no solo un gran ambiente al juego, sino también llegan a ser estresantes. Cabe destacar que el juego no debe ser jugado con el volumen bajo, debido a que existen pequeños sonidos que te ayudarán a predecir cosas que pueden acabar con tu vida.

El diseño de enemigos es bueno aunque no muy variado en cantidad por lo que nos toparemos con ellos en diversas ocasiones. Además de ellos, el juego cuenta en su mayoría con trampas que deberemos esquivar en los momentos precisos para evitar morir.

Una de las partes más divertidas del juego sin duda son las muertes, y no porque morirse sea divertido claro, sino porque las escenas de sangre junto a los sonidos que se emiten cuando mueres, son tan exagerados que llegan a ser bastante divertidos.

Jugabilidad

Dream Alone es un juego de plataformas donde nuestra misión será ir principalmente del punto A al punto B, y en cada cierto avance toparemos con un checkpoint para salvar nuestro progreso. Como mencionamos, nuestro protagonista deberá encontrar a Lady Death pero para ello deberá atravesar diversos escenarios.

Los escenarios cuentan con elementos que dan vida a todo lo que recorremos, los enemigos tienen patrones ya definidos por lo que en teoría es fácil poder esquivarlos, y ¿por qué esquivarlos? Porque eres un niño, y por ende, no sabes pelear, así que la mejor manera de sobrevivir será evitando el peligro.

Sumado a los enemigos los escenarios presentan diversidad de trampas, como púas, vacíos, o incluso paredes movedizas y hasta piedras gigantes. Todos esos y más elementos de igual manera deberán ser evitados, algunos con un tiempo demasiado justo que una falta de cálculo podría acabar con tu vida y hacer que tengas que iniciar desde el checkpoint anterior.

Una de las novedades que incluye este título es poder intercambiar dimensiones, entre lo real y lo ficticio, esto con el uso de pócimas que encontraremos a lo largo del juego. El poder cambiar entre dimensiones nos permitirá ver elementos que no se encuentran en una pero sí en la otra, por ejemplo, una palanca que nos sirva para detener el flujo de una pared movediza. Al ser un poder que se activa con pócimas, este solamente está disponible por tiempo limitado, por lo que de nuevo, tienes que ser muy preciso en lo que haces y en los tiempos que te tomas para realizar las acciones.

Otro de los poderes con los que contamos es el crear una copia de nuestro protagonista, de igual manera este se crea por tiempo limitado y posterior a eso se eliminará. Siguiendo el ejemplo anterior, la sombra podría ayudarnos a activar la palanca que aparece en la otra dimensión en lo que corremos para evitar morir por la pared en cuanto esta empiece a moverse.

El juego posee una serie de acertijos que si bien no tienes que pensarle mucho, si resultan interesantes. Además es un juego que requiere mucha paciencia para poder completar cada una de las secciones porque créeme, Dream Alone es un juego donde vas a morir y mucho.

Podría decir que el estilo de arte llega a ser un poco estresante mientras juegas, y es que juega un factor determinante en tu aventura. Lamentablemente para bien o para mal, este efecto no puede ser removido ni mucho menos modificado para hacer las cosas más fáciles para el jugador, por lo que de nuevo, la paciencia será tu mejor aliado.

Conclusión

Dream Alone es un buen juego indie con un estilo de arte diferente a lo que hemos visto, y sobretodo porque tiene un papel muy importante en la jugabilidad del título.

Si crees tener la paciencia suficiente y no te importa morir mil y una veces, entonces debes darle una oportunidad a este indie.

Agradecemos a Fat Dog Games y WarSaw Games las facilidades para realizar esta reseña.