Final Fantasy XVI

Final Fantasy es sin duda uno de los titanes de la industria de videojuegos, más aún dentro del mundo de los RPG o siendo más específico, JRPG, y personalmente fue la serie que me introdujo a ese género. Con el paso del tiempo y de las generaciones de consolas, no solo ha cambiado mucho Final Fantasy, sino para bien o para mal, ha ido modernizándose, algo que a veces funciona bien como en Final Fantasy VII Remake y otras no tanto como pasó con Final Fantasy XV (aunque personalmente me encantó). Lamentablemente, Final Fantasy XVI no me llamó la atención desde que se anunció, y eso no se debió a ningún desdén o falta de interés de mi parte por la saga, sino por la vuelta a sus raíces en cuanto a la historia, es decir, el hecho de que el título tomara lugar en un mundo estilo Europa medieval no generó más que apatía de mi parte, pues es una atmósfera que personalmente me aburre, al menos a comparación de una fantasía moderna.

A pesar de todo y debido a varias amistades, mantuve una mente abierta ante las posibilidades del título y siempre tuve la disposición de darle una oportunidad y ver si terminaba siendo algo que me llamara la atención, y si bien, ahora gracias a nuestros amigos de Square Enix, tuve la oportunidad perfecta de poder darle un chance sin tener que hacer una inversión económica para jugarlo. ¿Es digno sucesor de Final Fantasy XV? ¿Cumple las expectativas y satisface el hype que generó? ¿Es una entrada digna de esta nueva generación de consolas?

Historia

La historia sigue a Clive, un príncipe que debía heredar el poder del Fénix, un ser mitológico que protege a su reino, sin embargo terminó siendo heredado por su hermano menor. Clive decidió ser un guardián para el joven príncipe. Una noche, unos aliados del reino deciden traicionar a su gente y Clive y su familia se encuentran en una lucha desesperada para sobrevivir y evitar la destrucción de la familia real. Lamentablemente los eventos culminan con el asesinato de su padre y la destrucción del Fénix y su hermano menor quien era heredero del poder. Clive sobrevive y éste jura vengarse de aquella persona que asesinó a su hermano.

Personalmente no suelen llamarme la atención las historias inspiradas en Europa medieval sin importar cuanta fantasía tengan, esto se debe a varios aspectos como la manera en que la magia, las criaturas mitológicas o fantasiosas y los mundos llegan a sentirse demasiado similares entre historias y diversas obras. Otro problema que tengo es que las motivaciones de los antagonistas y villanos suelen ser poco interesantes a mi parecer, y los conflictos políticos suelen sentirse muy repetitivos y predecibles. Final Fantasy XVI no fue la excepción, y hablando de la política del mundo, de los reinos y las naciones, puedo decir que sí fue bastante cliché y estereotípico de estas historias, sin embargo, también diré que a pesar de todo, está muy bien escrito y planeado todo, dándole suficiente profundidad y personalidad para que incluso a mi me pareciera interesante lo que estaba pasando en el mundo y que mis propios prejuicios no impidieran que me guste la historia. Al menos ese era el caso hasta que llegué a un punto en la historia donde hubo un timeskip, o es decir, un paso de tiempo, un punto climático en la historia donde de pronto pasaron varios años en un instante entre un evento y otro. Eso me alejó por completo de la historia en la cual ya me había clavado bastante e hizo que perdiera todo interés en ella, pues me parece estúpido que me hicieran interesarme en los eventos actuales del mundo para después decir que ya pasaron 5 años y todo lo que había estado intentar entender de los eventos políticos y geográficos de pronto ya no eran válidos. Por más que intentaron actualizarme de que había sucedido en ese tiempo, mi interés por la historia ya había muerto y la historia no volvió a atraparme. Tacha.

Presentación

Visualmente Final Fantasy XVI luce increíble, los personajes se ven muy bien diseñados y la atención a los detalles me parece muy buena. Es raro tener un juego donde los husbandos, es decir, los varones del juego reciban más atención y tengan mejor diseño que las mujeres, con personajes como Cid y Clyde teniendo diseños increíbles mientras que Jill, siendo el personaje femenino más importante, se ve tan genérica y aburrida. Por supuesto, por suerte tenemos a Benedikta quien tiene un diseño increíble.

El mundo también está muy bien diseñado aunque personalmente me parece aburrido, eso no se debe a algún defecto del diseño en si, sino a mi desdén por el atmósfera inspirada en Europa medieval, pues los castillos, los paisajes, los senderos, todo se siente tan genérico y repetitivo que sentí que ya lo había visto en otros juegos y obras. A pesar de eso, la escala de varios escenarios ayuda a que uno sienta inmersión dentro de estos lugares enormes y sin duda ayuda a que todo se sienta realista y con vida.

Otro problema del juego es su rendimiento, pues está claro que el PlayStation 5 no tiene el poder suficiente para correr bien el juego. Yo lo jugué en modo rendimiento donde según, el enfoque sería correr a mayor cuadros por segundo con visuales más limitados y debo decir que muy seguido el PS5 batallaba para mantener un rendimiento estable y se notaban los bajones de cuadros por segundo. Diré que esto fue tan solo una inconveniencia ligera pues nunca fue lo suficientemente drástico para afectar mi experiencia o desempeño personal al jugarlo.

La música por lo general está increíble, con melodías fantásticas y épicas que generan adrenalina y emociones frenéticas en momentos dramáticos, sobre todo en grandes combates donde todo parece ser una película debido al nivel cinemático tan elevado que llega a tener el juego. A pesar de eso, hubieron momentos donde la música se sintió tan rara y tan fuera de lugar que me hicieron sentir que estaba jugando otra cosa totalmente y sinceramente hasta me dio pena ajena de lo feo que sentí a jugar esa parte. Quiero aclarar que solo fueron muy pocas ocasiones donde sentí eso y que por lo general la música funciona perfectamente.

Las actuaciones de voz están muy bien hechas, al menos en su versión en inglés. Sobre todo las voces de Clive y Cid, que en mi opinión tienen una actuación de voz increíble, que no solo los hace parecer husbandos de ensueño, sino que están muy bien caracterizados con lo que vemos en pantalla. Lamentablemente casi no podemos ver diferentes rangos emocionales en sus actuaciones pues el juego no solo es increíblemente serio, sino además las interacciones entre los personajes son muy pocas, pues de por si la variedad de personajes secundarios es discutiblemente la más reducida de cualquier Final Fantasy.

Jugabilidad

Final Fantasy XVI se siente muy diferente a entregas anteriores, pues prácticamente pasó a ser un juego de acción. Ésto se debe a varios grandes cambios, el primero vendría siendo en que el combate es de acción, similar al que vimos en FFXV sin embargo aún con más énfasis a combate rápido, a esquivar ataques y a usar habilidades de manera rápida y consecutiva. En ese aspecto, no tengo ningún problema con el juego, pues siento que el combate funciona bien aunque es de muy baja dificultad. El problema es que terminó sacrificando otros elementos RPG como el inventario, pues las armas y los accesorios prácticamente no hacen nada por el jugador y parece más un remanente obsoleto del pasado, y eso es una lástima porque no solo elimina la posibilidad de cambiar a nuestro personaje de manera significante según su equipo, sino que hace que las recompensas de misiones secundarias o enemigos difíciles sean prácticamente inservibles.

El árbol de habilidades también está bastante mediocre, pues no podemos hacer nada más que equipar 6 habilidades a la vez sin importar cuantas tengamos desbloqueadas, esto se siente aún mas cuando tomamos en cuenta que no podemos hacer uso de nuestros aliados de manera manual. Si bien, uno podría discutir que son más habilidades de las que tiene Kratos en God of War: Ragnarok, diría que eso es en comparación con un juego que claramente es de acción y no RPG, y si bien, el combate si tiene más habilidades de las que teníamos en FFXV, diría que tampoco es una buena comparación pues ese juego también es prácticamente un título de acción.

A fin de cuentas creo que el combate funciona muy bien, y a pesar de ser muy simple y muy fácil, me pareció muy pulido y bastante entretenido. Sin duda no tiene el mejor ni siquiera uno de los mejores combates dentro del género de acción, pero creo que sí tiene uno de los mejores combates de acción que hemos visto en un Final Fantasy, aunque personalmente prefiero uno híbrido como el de FFVII: Remake.

Si bien, la presentación de los escenarios está muy bien hecha, lamentablemente la exploración de estos es bastante limitada y mediocre, esto se debe no solo a que por lo general son muy lineales, sino que incluso los escenarios que no lo son, la verdad es que se sienten vacíos y aburridos, algo comparable al mundo de Breath of the Wild, pero con muchísimas menos cosas por hacer, y si agregamos a eso lo mediocre que son las recompensas a lo largo del juego, se podría decir que explorar es una pérdida de tiempo.

A fin de cuentas creo que Final Fantasy XVI es un sucesor espiritual de Final Fantasy XIII, el infame «corredores y videos», pues es prácticamente lo que ofrece el juego. Durante la historia principal, pasamos de mapa en mapa donde nos enfrentamos a hordas repetitivas de enemigos que se sienten como relleno, para encontrar escena tras escena de mucha historia, luego más corredores sin nada interesante por horas, hasta encontrar la siguiente tanda de videos que avanzan la historia, y así sucesivamente donde a veces encontraremos batallas de escala épicas que sufren de jugabilidad simplificada, o momentos dramáticos, ambos que sin duda son satisfactorios, pero quizá no sean suficiente para justificar el resto de la jugabilidad entre dichos eventos.

Conclusión

Final Fantasy XVI es un juego que ofrece bastante para un fan de la franquicia, con muy altos valores de producción y con muchas cosas que puedo decir objetivamente están bien, pero que a mi no me complacen personalmente.

Creo que es una entrega sólida dentro del mundo Final Fantasy, un juego de acción decente, un RPG mediocre, con una historia interesante pero no muy bien explayada, buena música y excelentes actuaciones de voz, y muchos husbandos para deleitar la vista y una waifu para adorar (no hablo de Jill).

Agradecemos a Square Enix las facilidades para realizar esta reseña.