Isonzo

Blackmill Games regresa al campo de batalla para una tercera entrega de su serie de juegos de la Primera Guerra Mundial después de cosechar no solo éxito sino comentarios importantes por parte de la comunidad tanto de Verdun como de Tannenberg.

En esta ocasión nos llevan a las llamadas Batallas de Isonzo, una serie de batallas libradas entre los ejércitos del Imperio de Austria-Hungría y del Reino de Italia durante la Primera Guerra Mundial y que tuvieron como escenario la zona en torno al río Isonzo en la frontera oriental de Italia entre junio de 1915 y noviembre de 1917.

Con dos juegos previos, ¿realmente han aprendido de sus errores? ¿es un juego que valga la pena tu tiempo y dinero?

Historia

Como tal Isonzo no cuenta con un modo campaña y como mencioné al inicio es un juego que meramente trata de recrear un hecho histórico de la vida real, un hecho que personalmente jamás había escuchado, pero que es bueno conocer, aunque sea a grandes rasgos, ya que durante las pantallas de carga podrás ver diferentes textos que brindan datos sobre los escenarios en los cuales ocurrieron dichas batallas y algunas veces qué sucedió.

Presentación

Isonzo es un juego que visualmente luce bastante bien a pesar de no tener ni el dinero ni la calidad de lo que podrías llamar un juego AAA. Es un título que en sus seis escenarios ofrece una gran vista de aquellas que gustosamente puedes quedarte parado observando, si no fuera porque un francotirador puede matarte en el momento menos esperado.

Los diferentes escenarios tienen un buen diseño y permite que en cierta forma el juego no sea enteramente lineal, es decir, puedes atacar de diferentes flancos y si tienes suerte, incluso podrías cambiar la partida gracias a tu perspicacia.

Los diseños de los personajes sin embargo dejan un sabor de boca agridulce, como dije, no son calidad AAA, tampoco son gráficos de PS1, pero si causan un poco de cringe en sus animaciones, en lo toscos que se ven algunos movimientos al caminar o al morir o incluso en lo lentos que pueden ser en general. De igual manera no hay una diferencia abismal, más allá de cosméticos que debes comprar que honestamente sirven para nada porque tú no ves a tu personaje en el juego, salvo cuando mueres. Respecto al diseño de los personajes como tal, eso quiere decir que es como que veas un copy paste del mismo modelo durante los 15 o más minutos que dure tu partida.

La banda sonora por otro lado es sumamente épica, desafortunadamente se disfruta mucho más solo en el menú porque ya en la batalla se ve opacada por los efectos de sonido de balas, cañones, gases, silbatos, gritos, etc. etc. Por cierto, el trabajo de voces está bien, pero realmente se limita a gritos de guerra esporádicos.

Isonzo es un juego que desafortunadamente tiene varios problemas a nivel técnico siendo la mayoría bugs como aquellos que hacen que te atores al hacer respawn o moverte por ciertos lugares, que si bien en éstos últimos nunca llegué a quedarme atorado definitivamente, si era tedioso encontrar la forma de salirse.

También tenemos problemas en la interfaz de usuario, los mensajes de ayuda son excesivamente molestos, no hay sonido direccional como para saber de donde vienen los disparos ni mucho menos un chat de voz para que puedas comunicarte con tus compañeros de equipo, ya sea en un grupo o cuando estés cerca de ellos.

Jugabilidad

Pasando a la jugabilidad, estamos ante un juego de disparos ambientado en la Primera Guerra Mundial con unas mecánicas de juego que tratan de emular aquella época, y quiero dejar bien claro este punto, porque si piensas que si jugar Call of Duty o Fortnite te preparan para jugar Isonzo, déjame decirte que estás muy equivocado, porque aquí todo es leeeeeeento.

En primer lugar, contamos con un sistema de progreso que significa que por cada una de las clases, siendo éstas oficial, fusilero, ingeniero, asalto, montañero y tirador, tendrás que subir de nivel independientemente y esto lo logras simplemente jugando con cada una de ellas.

Mientras más juegues, más rápido avanzas de nivel, aunque esa rapidez debe ir entre comillas porque creo que el sistema de progreso es el punto más doloroso de este juego, pues si eres alguien que juega casualmente déjame decirte que vas a tardar una eternidad en lograr un buen nivel que te permita desbloquear más armas, granadas o habilidades y este es un gran problema porque obviamente si te enfrentas a alguien en la batalla que es nivel 15 y tú eres 1, la diferencia de arsenal es abismal. Cabe destacar que afortunadamente no tendrás que subir de nivel por cada bando, un dolor de cabeza menos.

El único modo de juego que se ofrece como tal es la ofensiva en la cual, como imaginarás, deberás atacar hasta tomar el control del otro lado del mapa. Hay un total de 48 jugadores que pueden formar parte de la partida el número total de «vidas» que tienen está arriba de los 300. Perderás ya sea que se acaben todas esas vidas o que el objetivo se cumpla. Spoiler, las vidas se acabarán siempre porque en mi experiencia nadie se preocupa por cumplir con los objetivos que marca el juego.

Puedes cambiar de servidor, unirte a partidas diferentes o simplemente crear tu propia partida personalizada. Independientemente de lo que elijas, básicamente tendrás que adivinar qué hacer porque Isonzo brilla por su falta de tutoriales. El vídeo que en teoría debe explicarte qué hacer está escondido en un botón con el símbolo de interrogación y durante la partida te salen millones de mensajes de ayuda, pero realmente creo que éstos solamente causan más confusión. Ni siquiera te podría decir cuales son los objetivos que marca el juego porque honestamente nunca los entendí más allá de «dominar» una región o de defenderla.

Durante la partida también podrás construir trampas, barracas, operar cañones o si usas la clase del oficial podrás dar órdenes en cierta forma. También deberás usar una máscara porque habrá situaciones en las cuales avienten gases letales.

Los otros grandes problemas del juego incluyen no contar con un sistema anti trampas, muy poca recompensa por jugar y divertirte, o incluso por cumplir algunas tareas para cada clase como pueden ser «matar a cierto número de enemigos».

Conclusión

Isonzo es un juego decente, que deja mucho que desear, que si bien ofrece una experiencia más realista en cierta forma respecto a un hecho histórico como la Primera Guerra Mundial, también es frustrante enfrentarte a alguien con un nivel mucho mayor y obviamente con un mejor arsenal que tú, porque déjame decirte que ni siquiera puedes aventar granadas al inicio.

Hay mucho trabajo aun por hacer, y por eso no creo que pueda recomendar que compres Isonzo hoy en día, salvo claro que encuentres un gran descuento.

Agradecemos a BlackMill Games las facilidades para realizar esta reseña.