Seed of Life

Desde hace ya varios años hemos leído o escuchado sobre cómo el cambio climático está afectando a nuestro planeta, y si bien para algunos esto sigue siendo una gran mentira, para otros es algo sumamente preocupante.

Lo anterior lo menciono porque es una forma de entender lo que Seed of life trata de darnos a conocer a través de su argumento, y de lo importante que es y debe seguir siendo, el cuidar el lugar en el que vivimos.

¿Listo para una aventura por un mundo que ha perdido prácticamente toda esperanza de vida?

Historia

Seed of life nos lleva a conocer la vida de Cora, una chica de la cual sabemos muy poco, más allá de que su abuelo era el encargado de ver por la vida del planeta en el que vive, Lumia, y es que la misión del abuelo era recuperar todo aquello que dicho planeta ha perdido, sin embargo, no se específica porque lo perdió, ni mucho menos porque Cora es la encargada de completar la misión ahora.

El argumento no es más que una excusa para el desarrollo del juego, y como he dicho, realmente es muy poco explícito sobre el porque tenemos que salvar a Lumia, por lo tanto, no tienes una motivación real, salvo que realmente quieras explorar y salvarlo sin una razón evidente más allá de que está muriendo.

Los diálogos tampoco ayudan a la trama, de hecho el mayor problema es justamente que no existe algo sustancial que aporte a la trama pues Cora se la pasa prácticamente hablando sola mientras rememora algunas cosas con su abuelo, hasta que aparece un segundo personaje, por decirle de alguna forma, que nos ayudará a completar la misión, pero que tampoco aporta mucho a la trama como tal.

En pocas palabras, Seed of life no es un juego que se recomiende por su historia, porque básicamente no la tiene.

Presentación

El juego tiene un estilo en 3D, que, hay que decirlo, para ser un juego de 2021, pareciera ser un título de la época del GameCube con unas texturas, iluminación, animaciones y un largo etc que deja mucho que desear. Entiendo perfectamente que la idea es mostrar un mundo desolado y acabado, pero creo que definitivamente no ayudó mucho tal vez la paleta de colores elegida al ofrecer tonalidades demasiado opacas que incluso cuando vas de ocioso a encender las linternas alrededor del mundo tampoco logras ver un cambio sustancial como decir «esa luz de esperanza al final del camino».

El diseño de Cora es muy bueno, realmente lo es, sin embargo su animación es muy torpe, no hay lipsync y tampoco se le puede exigir a un desarrollo indie, pero eso no justifica que sea extremadamente complejo congeniar con la protagonista porque pareciera que ni mueve los labios al hablar, a esto súmale que la actuación de voz es muy pobre, sin emoción, sin cariño, sin empeño, pareciera que literalmente está leyendo y eso demuestra que no hubo una dirección en el trabajo de voces.

El mundo es pequeño y no existe como tal una exploración, aunque los desarrolladores mencionen que es un título semi-abierto, realmente no lo es, porque todo es sumamente lineal, vas de un lado a otro siempre con la finalidad de encontrar algo que te va a servir, no porque realmente quieras perderte en lo vasto y hermoso que puede ser Lumia. Una de las mecánicas que te limitan en cierta forma la exploración al inicio es que el aire que respira Cora es tóxico y hace que su vida baje poco a poco, sin embargo, no es un impedimento conforme progresas, y a pesar de que personalmente siempre busqué más allá de lo tradicional, nunca sentí una satisfacción real por dicha exploración.

La banda sonora y los efectos especiales están bien, nada sorprendente, pero tampoco lamentable. El diseño de enemigos es muy pobre porque realmente todo se centra en lo malo que se respira, es decir, es como si hubiera un gas tóxico, que de hecho en algunas zonas es muy evidente visualmente, que es digamos el más grande enemigo a vencer. Fuera de lo anterior tenemos a otros enemigos que van de lo pequeño a lo grande, pero más allá de ser un enemigo, son simplemente un estorbo porque como tal no puedes pelear con ellos, simplemente evitarlos.

En mi experiencia en PC nunca tuve problemas de cierres inesperados, caídas en los cuadros por segundo o bugs extraños, pero sí eran un problema los constantes saltos inesperados de pantalla así como también algunos problemas con la cámara que impedían que visualice de forma correcta dónde se encontraba mi personaje y cómo poder progresar.

Jugabilidad

Seed of life es un juego de esos que no te llevan de la mano, y eso en primer lugar merece un aplauso, porque realmente es complejo entender qué es lo que tienes que hacer, a donde ir y como llegar ahí. Sin embargo, es una mecánica que una vez entiendes como funciona, se convierte en todo lo contrario, una experiencia de juego muy sencilla y muy fácil de dominar.

Nuestra protagonista Cora inicia su viaje en casa, sale y se encuentra que hay una especie de santuarios que le brindan poderes, pero que dichos santuarios deben ser activados mediante la resolución de acertijos que son básicamente mover elementos para formar la figura correcta, sin embargo, no es tan fácil, pues para activar esos mismos santuarios debes tener unas piedras o cristales, mismos que encuentras en zonas aledañas y que obtienes mediante un pedestal que desactiva un campo de fuerza que hasta el momento de desactivarse, te impedía visitar otras zonas.

Esa es digamos, la mecánica principal del juego, encontrar los campos de fuerza, explorar para encontrar el pedestal que los activa, desactivarlos, obtener dicho cristal, y finalmente encontrar el santuario y colocar el número de cristales necesarios para ahora sí poder activarlos no solo como punto de guardado, sino también como fuente de nuevas habilidades para Cora.

Como dije, dichos santuarios nos brindarán nuevas habilidades, esto en parte también gracias al personaje que nos ayudará a lograr nuestro objetivo. La idea es explorar el mundo, encontrar los santuarios, activarlos y obtener las nuevas habilidades, que, entre otras, incluyen la posibilidad de curarse, correr mucho más rápido y ver plataformas ocultas. Las habilidades sin embargo dependen de que tanta energía tengas, la cual también puedes aumentar si encuentras plantas que te permitan aumentarla, y mientras más energía tengas, más fácil será el juego, por ejemplo para atravesar una zona llena de gas tóxico en la cual no solo deberás correr, sino activar la visión para ver plataformas ocultas a la par que te curas para no morir. En la primera parte del juego obtienes la mayoría de las habilidades, y en la segunda, el resto.

Es un juego que como dije también requiere habilidad en las plataformas pues no es muy preciso que digamos y yo en más de una ocasión terminé cayéndome porque Cora simplemente no logró caer en el lugar correcto de la plataforma. Los acertijos en cierta forma se limitan a la resolución de los rompecabezas para activar los santuarios o tal vez a encontrar los pedestales para desactivar los campos de fuerza.

Finalmente decir y recordar que anteriormente mencioné que es un juego que falta ser pulido, por ejemplo, es muy común que Cora pueda subir un desnivel en el piso por si sola, pero es aún más común que no pueda hacerlo por extraño que parezca, lo cual simplemente hace que ella se atore y tengas que brincan o rodear para poder avanzar. Otro apartado son las anteriormente mencionadas plataformas cuya mecánica no es perfecta, pero tampoco es pésima. Finalmente está la navegación: el ítem que también te ayuda a realizar las habilidades de Cora sirve como compás para indicarte hacia donde debes ir, sin embargo, puede ser medio confuso, y de hecho no fue hasta después de más de un par de horas que entendí como funcionaba y me pude guiar. También hacer mención por ejemplo, cuando se trata de escalar paredes gracias a las plantas, una mecánica que en más de una ocasión, junto a la cámara, provocó que me cayera o que Cora pareciera que estuviera flotando en el aire en lugar de estar agarrada de las plantas.

Conclusión

Seed of life es un juego decente, pero que también peca de cosas muy básicas hoy en día como la mecánica de plataformas o los acertijos. Su arte no es de lo mejor a mi gusto, principalmente porque lo hace parecer un juego muy viejo en su mayor parte, y eso a muchos jugadores podría quitarles las ganas de jugarlo hoy en día.

Tampoco es muy largo en su duración total, y si bien el inicio puede ser complejo de entender cómo guiarte o qué hacer, una vez que le agarras la onda te moverás como pez en el agua hasta el final.

Agradecemos a Leonardo Interactive las facilidades para realizar esta reseña.