Toy Story 4

Hace 9 años que llegó la que nos juraron sería la última entrega de la franquicia de Toy Story, una serie de películas con la que la mayoría de los niños de los 90s crecieron y cuya base de fans es seguramente inmensa.

Y sin embargo, aquí estamos, recibiendo la cuarta parte de serie. Pero, ¿realmente valió la pena una cuarta entrega? ¿es ese gran cierre que viene a continuar aquel cierre que se dio en la tercera entrega?

Historia

Toy Story 4 inicia justamente donde terminó la tercera entrega, pero con una pequeña introducción a digamos, lo que sucedió del otro lado de la pantalla y porque Bo Peep ya no forma parte de la pandilla de juguetes. Dicha escena también se entrelaza con toda la fase del crecimiento de Andy hasta aquel emotivo final de la tercera entrega cuando él decide regalarle los juguetes a Bonnie.

Y no es spoiler, son literalmente los primeros minutos de la película para entrar en contexto.

Esta cuarta entrega trata de romper la idea principal que se vendió desde la primera parte de la franquicia. Woody no tiene porque ser «solo de un niño», ni él, ni ningún juguete. La trama de la película gira entorno a la clásica aventura donde el grupo de amigos debe rescatar a un juguete perdido, en este caso a Forky, pero también gira entorno a la madurez que cada «persona» o en este caso, «juguete», debe tener por sí solo a lo largo de su vida.

La historia es decente y sobretodo divertida, con Ducky y Bunny siendo totalmente los protagonistas de la parte cómica de la película y toda la imaginación que demuestran en pantalla y que claro, es una de las maravillas que los niños pueden disfrutar: un gran imaginario.

Y aunque a muchos seguro les ofenderá, el papel de Bo Peep es totalmente otro en esta última entrega, tomando el liderazgo y protagonismo de la película incluso me atrevería a decir al mismo nivel que Woody en las tres entregas pasadas. ¿Feminismo? ¿Empoderamiento? ¿Casualidad? No lo sé, pero definitivamente es de agradecer el ver cómo otro juguete puede relegar un papel protagónico a un juguete que llevaba más de 20 años en el liderato.

Toy Story 4 para mí, no es tan emotiva como lo fue Toy Story 3, es una película que incluso pudo funcionar como un spin-off y no necesariamente ser un número consecutivo de la serie, y aun así, hubiera funcionado. Es divertida, chusca, sentimental en algunos momentos y con un mensaje claro, eso ni quién lo niegue.

Y al final, es una película que viene a cerrar un ciclo para ciertos personajes en cuestión. Lo cual incluso se puede traducir en que no necesariamente es el final de la franquicia.

Presentación

Es interesante ver como ahora la película nos lleva a un lugar totalmente diferente de lo que hemos visto en la trilogía, pues si bien en las anteriores la situación ocurría en la calle, la mayor parte del tiempo era en lugares cerrados lo cual podríamos decir era más «fácil» en términos de animación, aunque no me atrevo a asegurar ese hecho.

En cambio, Toy Story 4 nos lleva a vivir toda la trama en un lugar abierto en su mayoría, en una feria donde vemos diversas personas interactuando, todos los juegos mecánicos, diversas luces que iluminan la zona y las casa / edificios aledaños así como claro, el espectáculo de luminarias que adornan el interior de la tienda de antigüedades hacen de Toy Story 4 un deleite visual.

E incluso me atrevo a decir que la combinación de todos los elementos hacen de esta película, la más atrevida en guión, escenarios y personajes que ha habido en la serie hasta el momento.

La música es lo clásico que escuchamos en la serie de Toy Story con el ya clásico «Yo Soy Tu Amigo Fiel» en las situaciones que más lo ameritan. Y sin duda tengo que aplaudir la fotografía: es fantástica.

En cuestión de los personajes tenemos a los ya clásicos, y claro el regreso de Bo Peep y la introducción de personajes nuevos como Ducky, Bunny, Forky, Duke Cabook, Gabby Gabby, Vincent y Giggle McDimples cuya presencia es la cereza en este gran pastel de personalidades que nos ofrece la película, cada uno con una presencia relevante, aunque claro unos más que otros, pero siempre otorgando momentos divertidos y/o emotivos en la película.

Y es que tal vez lo más destacado de los personajes no es su presencia, sino la influencia que tienen en la trama y en la madurez de algunos personajes para otorgar un final interesante en la franquicia.

Conclusión

Toy Story 4 es una gran película, pero no el gran cierre que fue Toy Story 3. Lo es sí, para situaciones específicas, pero también, como dije, abre la puerta a que la franquicia pueda continuar por otros años.

Tiene un gran mensaje, que no aplica a los juguetes, sino a los seres humanos, y para mí ese mensaje se llama madurez.